NUESTRO REPRESENTANTE DE CORANI LIDERA LA NUEVA JUNTA DIRECTIVA DE LA CENTRAL ÚNICA PROVINCIAL DE RONDAS CAMPESINAS DE CARABAYA
En el Encuentro Provincial de las Rondas Campesinas realizada en el Distrito de Ituata (Tambillo) el día 16 de diciembre, eligieron a los nuevos integrantes de la Central Única Provincial de Rondas Campesinas de la Provincia de Carabaya donde nuestro representante de corani lidera las elecciones como presidente el señor: Elviro Mamani Montalvo.
Cabe precisar, que este evento y estas elecciones, fueron con la participación de los 10 distritos de Carabaya, en donde componen las diferentes bases rondiriles.
Los candidatos según listas presentadas fueron elegidos por votación democrática quedando de la siguiente manera:
Presidente: Elviro Mamani Montalvo (Corani).
Vicepresidente: Cornelio Mayhua Vargas (Ollachea).
Secretario de Actas: Román Gutiérrez Cahuana (Ituata).
Secretario de Economía: Elmer Peralta Mollocondo (Macusani).
Secretario de Orden y Disciplina: Gilver Tumbillo Quispe (Usicayos).
Secretario de Organización: Emilio Leonardo Condori (Ajoyani).
Asuntos Femeninos: Santos Mamani Vega (San Gabán).
Secretario de Derechos Humanos: Nixon Pacco Merma (Coasa).
Secretario de Medio Ambiente: Ing. Marcelino Zepe Quispe (Crucero).
Secretario de Cultura y Deporte: Juan Tapia Salcca (Ayapata).
Finalmente, el juramento a la nueva junta directiva estuvo a cargo del señor Segundo Patatingo Mamani, actual dirigente provincial de las rondas campesinas
CUNA DE LAS RONDAS CAMPESINAS
Las rondas campesinas del Distrito de Corani provincia de Carabaya son un “proyecto” producido en las comunidades de altura de la provincia, entre los campesinos alpaqueros donde las rondas de Corani y sus cinco comunidades Acconsaya, Isivilla, Quelcaya, Chacaconiza, Chimboya, tienen un lugar clave, reconocido por todos los carabaynos como “CUNA DE LAS RONDAS CAMPESINAS”. Lo que esta organización superó a toda las problemas y Construyó por medio de sus acciones, un espacio para que se produzca una especie de identidad imaginada de pertenencia supracomunal, en la cual el campesino podía reconocerse a sí mismo como agente de su posicionamiento en los espacios del poder local distrital y provincial. La ronda logra esto por medio de una actividad sostenida y prolongada de articulación, y de presencia en la vida de los distritos y la provincia. En este sentido, la actividad de la ronda en corani se diferencia cualitativamente de esas movilizaciones campesinas que se producen en la sociedad rural peruana de hoy como respuesta a un problema puntual, real o imaginario, y que tantas veces conduce a los campesinos y frentes de defensa. Nuestra conclusión final es que la ronda campesina de Corani muestra que, en los espacios rurales del sur andino, las poblaciones campesinas comuneras pueden constituirse efectivamente en actores claves de la consolidación de la institucionalidad democrática desde sus propias iniciativas y recursos socio-culturales. Tal como existe en Corani, la ronda campesina es un espacio clave para cualquier gobierno local como la nuestra.